Criptomonedas Camboya: Qué hay detrás de los proyectos cripto en el sudeste asiático

Las criptomonedas Camboya, proyectos digitales que se presentan como originarios o enfocados en Camboya, pero que en la mayoría de los casos no tienen base real ni equipo local. También conocidas como criptomonedas de Asia del Sudeste, estas suelen surgir en foros y redes sociales con promesas de altos rendimientos, airdrops gratuitos o intercambios exclusivos. Pero la realidad es que casi ninguna tiene oficinas, equipo verificable o presencia legal en el país. Camboya no es un centro de innovación cripto como Singapore o los Emiratos, y eso lo saben los estafadores. Por eso, cuando ves un proyecto que dice "nacido en Phnom Penh" o "regulado por la autoridad cripto de Camboya", lo más probable es que sea una mentira.

Lo que sí existe en Camboya es un mercado de criptomonedas informal, impulsado por jóvenes que usan USDT para enviar remesas, comprar bienes desde el extranjero o pagar servicios digitales. Pero eso no significa que haya exchanges locales confiables. Plataformas como ZappyPay, un servicio de pago con cripto, no un intercambio, o Ourbit, un exchange con advertencias regulatorias y sin transparencia, aparecen en búsquedas relacionadas con Camboya, pero no tienen conexión real con el país. Son nombres que usan geolocalización falsa para parecer legítimos. Algunos incluso copian el diseño de Binance o Bybit para engañar a quienes buscan seguridad.

Si buscas airdrops o tokens vinculados a Camboya, ten cuidado. Los airdrops reales no piden que conectes tu billetera a sitios desconocidos ni que pagues por "activar" tu participación. En cambio, los estafadores crean tokens como WIFCAT COIN, una moneda meme sin equipo ni utilidad o OurBitch (BITCH), un token sin poseedores reales y con datos contradictorios, y los promocionan como "exclusivos de Asia". El resultado es siempre el mismo: la gente pierde dinero y nadie responde. La blockchain no miente: si un token no tiene liquidez, no se negocia en exchanges serios y su contrato no tiene auditoría, no es una inversión. Es un riesgo.

Lo que sí vale la pena entender es cómo los usuarios en países como Camboya usan criptomonedas de forma práctica: como herramienta para escapar de sistemas financieros ineficientes, no como especulación. Pero eso no requiere que te metas en proyectos falsos. Lo que necesitas son plataformas reales, reguladas, y una buena dosis de escepticismo. Abajo encontrarás análisis reales de intercambios, airdrops y tokens que sí existen —y de los que realmente vale la pena saber, sin importar dónde digan que nacieron.